El proceso
de recuperación se produce antes, durante y después del esfuerzo, y su magnitud
depende, fundamentalmente, de los grados de fatiga, esto es, de la relación
existente entre la intensidad de la carga utilizada y el tiempo dedicado al
descanso posterior. Los procesos de recuperación que se emplean durante la realización
del entrenamiento se utilizan como factores que propician la adaptación de los
principios de la carga, mientras que los que se emplean después del esfuerzo
constituyen la etapa más decisiva porque es en esta etapa cuando se llevan a
cabo los mecanismos de adaptación biológica. El conocimiento del grado de
recuperación que requiere cada una de las cargas utilizadas en el entrenamiento
constituye uno de los puntos estratégicos más importantes en la planificación
del entrenamiento deportivo. Generalmente, los manuales dedicados a la teoría
del entrenamiento informan sobre los principios del entrenamiento, pero no es
habitual encontrar información acerca de un aspecto tan crucial como es el
conocimiento de los tiempos de recuperación que requieren los ejercicios. La
tabla 2 presenta los requerimientos que se dan para determinadas cargas de
trabajo. Cuando los niveles de fatiga alcanzadas llevan a una regresión
constante del nivel deportivo, se puede hablar de la aparición del denominado
sobrentrenamiento, cuyos síntomas pueden apreciarse en los planos psíquico y
somático. Más concretamente, el sobrentrenamiento propicia que se produzcan
perdidas en la coordinación de los movimientos, errores en la ejecución de los
gestos técnicos, contracciones musculares estáticas, falta de seguridad,
fluidez e inestabilidad en el ritmo de ejecución. En el plano psíquico, el sobrentrenamiento
afecta también a diversas funciones y sus efectos son visibles a partir de la
aparición de las siguientes señales de alarma:
·
Aumento
de la irritabilidad.
·
Estado
de malestar excesivo; conflictos latentes.
·
Falta
de contacto con el entrenador o compañeros de entrenamiento.
·
Hipersensibilidad
en los niveles de crítica.
·
Aumento
de la indolencia.
·
Falta
de motivación y ganas de competir. Miedos y aumento de la ansiedad ante la
competición.
·
Pérdida
de confianza.
·
Una
falta de tono vital general.
·
Etcétera.
Entre los
medios más utilizados para favorecer la recuperación de los deportistas se
pueden apuntar, entre otros, el descanso activo, el masaje deportivo, el sueño,
el entrenamiento psico-regulador y la fisioterapia.
Orientación
de las cargas de entrenamiento
La
orientación de las cargas de entrenamiento es definida por la cualidad o la
capacidad que las cargas desarrollan (velocidad, fuerza, flexibilidad,
coordinación, etc.), el sistema funcional que solicitan (procesos aerobios o
anaerobios) o finalmente por los recursos que requieren (capacidades de
coordinación, tensión mental, etc.).
Esta
orientación puede ser selectiva
intervienen por su acción privilegiada sobre un sistema funcional; al
contrario, las cargas de carácter complejo solicitan diversos sistemas
funcionales. Naturalmente, una acción no puede ser selectiva en el sentido
estricto del término: toda acción motriz pone en juego toda una serie de
mecanismos reguladores. Sin embargo, la elección de las cargas permite solicita
determinadas funciones de forma máxima, movilizando muy débilmente las demás.
Es pues, más exacto hablar de orientación privilegiada que de orientación
selectiva.
De hecho, es
posible realizar ejercicios, o incluso microciclos, de orientación selectiva,
destinados a intervenir sobre un punto muy especial de la preparación. Al
contrario, a escala del mesociclo o de la etapa de entrenamiento, la
orientación sólo puede ser compleja, o como máximo, privilegiada (Platonov,
1990:24).
Ver carga de entrenamiento,
sesión de entrenamiento de finalidad exclusiva, sesión de entrenamiento de
finalidad compleja.
Referencias
García, M., Navarro, M. & Ruiz, A.
(1988). Bases teóricas del entrenamiento deportivo. Barcelona, España: Roca.
Manno, R. (1991). Fundamentos del entrenamiento deportivo. Barcelona, España: Paidotribo.
Morehouse, E. & Millar, T. (1970).
Fisiología
del ejercicio. Buenos Aires,
Argentina: Ateneo.
Platonov, N. (1988). El entrenamiento
deportivo. Teoría y metodología. Barcelona, España: Paidotribo.